El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, dijo el lunes que estaba renunciando a sus esfuerzos para formar un nuevo gobierno después de no formar una coalición después de una elección parlamentaria no concluyente.
Netanyahu, quien encabeza el partido derechista Likud, dijo que le devolvería el mandato al presidente de Israel, Reuven Rivlin.
Rivlin dijo que ahora mantendrá consultas con los diversos partidos políticos para decirles que tiene la intención de encargar al rival centrista de Netanyahu, Benny Gantz, con el trabajo de armar un nuevo gobierno.
El partido Azul y Blanco de Gantz fue el más grande que surgió de la votación del 17 de septiembre, aunque tampoco tiene un camino claro hacia una mayoría parlamentaria.
Si tampoco logra atraer a suficientes socios, lo más seguro es que conduzca a otra elección general, la tercera desde abril.