Anhelo por Rubén, continuación | elsaelsa

19 años.

Me sentí triste, Reuben, después de enterarme de que mi esposo (con quien ahora estoy casada) se había casado con otra persona. Me desanimó tanto que no salí con nadie durante seis meses, lo cual son eones a esa edad, y también para alguien como yo que realmente disfruta estar rodeado de hombres.

En fin, yo no tenía marido, pero sí lo tuve, Reuben, que por cierto vestía pantalones blancos. Sabía que estaba fantaseando. Te lo diré, era plenamente consciente de lo que estaba haciendo, lo cual puede resultar difícil de creer para un chico de 19 años, pero te diré cómo lo supe.

Lo sabía porque era bartender y lo había sido durante cuatro años. Tenía experiencia por decir lo menos. Sabía lo que pasaba en los bares y sabía especialmente sobre el asiento del pájaro gato.

Me enteré del asiento del pájaro gato cuando un viejo bastardo borracho pasó junto a mí en un bar y me dijo que me había visto en la calle. Buen Si. Yo era el camarero del bar de la calle, pero luego dijo esto, o mejor dicho, babeó y escupió porque estaba muy borracho (Neptuno). “Te vi“, dijo con reproche. “Estabas sentado en el asiento del pájaro gato”.

Bueno, maldita sea. No sabía qué era un asiento para pájaros, así que no lo sabía. Se suponía que debía abofetear al chico o darle las gracias, así que murmuré algo, fui a casa y llamé a la biblioteca.

Llamé específicamente al departamento de referencias porque, aunque en ese entonces no teníamos Internet, podías llamar al departamento de referencias de la biblioteca pública y obtener respuesta a cualquier pregunta.

“¿Qué es un asiento para pájaros gato?”, pregunté.

La bibliotecaria me dijo que era una posición elevada que se utiliza a menudo cuando se habla de políticos, y se lo agradecí. El punto es que sabía que Reuben estaba en el asiento del pájaro gato. Estaba en el escenario, ¿no?

También hay un bartender en el escenario y si te estás preguntando eso, todo lo que tienes que hacer es ser bartender y luego darte la vuelta y poner dinero en la caja registradora mientras todos te miran el trasero. De hecho, tal vez era tu trasero en el escenario, no tú, pero definitivamente Reuben estaba en el escenario, o tal vez era su polla en el escenario porque esos pantalones eran blancos.

Continuará.

Heaven32: