Los investigadores realizaron simulaciones por computadora para investigar qué hubiera pasado si el sitio de impacto hubiera estado cubierto por una capa de hielo cuando golpeó el meteorito. En unos instantes, el impacto habría vaporizado suficiente hielo para arrojar más de 100 mil millones de toneladas de vapor de agua a la atmósfera superior. El vapor de agua es un poderoso gas de efecto invernadero, por lo que este evento podría haber creado las condiciones adecuadas para calentar la superficie del planeta y poner fin a la Era de Hielo. Sin embargo, para que esto suceda, el vapor de agua habría necesitado permanecer en la atmósfera durante cientos o miles de años, en lugar de caer de nuevo a la superficie de la Tierra como lluvia o nieve, dice Erickson.