La Cámara de Representantes de los Estados Unidos adopta la Ley Uigur que sanciona a China



La Cámara de Representantes de los Estados Unidos aprobó abrumadoramente un proyecto de ley que exige que la administración Trump endurezca su postura hacia China sobre la detención forzada de Beijing de más de un millón de uigures étnicos en campos de reeducación.

El proyecto de ley fue aprobado con el voto 407-1 y exige que Trump, que se ha negado a condenar al Partido Comunista Chino por el encarcelamiento masivo de grupos étnicos y religiosos, ejerza presión sobre Beijing por sus graves violaciones de derechos humanos en la provincia de Xinjiang y Hong Kong. Por primera vez, ahora se requiere que la Casa Blanca imponga severas sanciones a los miembros clave del politburó, incluso mientras busca un acuerdo comercial con Beijing.

Poco después de que se aprobara la Ley Uigur, el Ministerio de Relaciones Exteriores de China emitió un comunicado condenando la medida, diciendo que el proyecto de ley "difama sin sentido los esfuerzos de China para eliminar y combatir el extremismo".

Después de firmar la ley, el gobierno de Trump tiene 120 días para proporcionar al Congreso una lista de los funcionarios del Partido Comunista chino que consideran "responsables o conscientemente involucrados en graves violaciones de los derechos humanos" contra los uigures.

El proyecto de ley también exige sanciones contra altos funcionarios chinos que son identificados como "responsables" de violaciones de los derechos humanos y específicamente nombra al Secretario del Partido Comunista de Xinjiang, Chen Quanguo.

Aunque China rechaza las violaciones de los derechos humanos en la provincia de Xinjiang, ha reconocido la existencia de algunos "centros de entrenamiento de reeducación", que según ellos fueron diseñados para combatir el extremismo islámico, pero ha negado repetidamente que se use tortura o adoctrinamiento en los campos.

La detención masiva de uigures, kazajos y uzbekos en Beijing comenzó en 2017 y ha sido ampliamente condenada por otros países como una violación importante de los derechos humanos.

Desde que el Partido Comunista Chino comenzó a rodear las comunidades musulmanas de Xinjiang, a las que la población uigur local se refiere como el Turquestán Oriental, al menos 1 millón de personas han sido puestas en campos de reeducación.

LO MÁS LEÍDO

Leave a Reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *