El fin de semana, Luxemburgo se convirtió en el primer país del mundo en introducir el transporte público gratuito para todos. Según el ministro de movilidad del país, Francois Bausch, para los trenes, autobuses y tranvías todo el mundo puede simplemente "subir". Luxemburgo invirtió 4.500 millones de euros en redes de trenes y tranvías para hacerlo lo más atractivo posible y hacer que las personas dejen el coche en casa.