La evolución prioriza las adaptaciones que ayudan a los organismos a sobrevivir, pero nadie dijo que encajar en tu nicho ecológico iba a ser particularmente bonito.
Un gorrión común es pequeño y moteado de marrón para mezclarse con su hábitat típico del bosque. Un ringtail parece un gato apareado con una ardilla y deja que un mapache críe a los bebés, por razones de adaptación que solo podemos adivinar.
Este es el loco mundo de la selección natural, y hoy presentamos 12 especies que parecen bastante extrañas, pero cuyo diseño único les ha permitido persistir.