Ha sido apodada la “peor fila de Wimbledon hasta la fecha”, pero Jesse Besse y sus compañeros de piso no se quejaron cuando pasaron el tiempo en su sofá rosa con jarras de Pimms.
Ha sido apodada la “peor fila de Wimbledon hasta la fecha”, pero Jesse Besse y sus compañeros de piso no se quejaron cuando pasaron el tiempo en su sofá rosa con jarras de Pimms.