UNA nuevo reporte del Grupo de Reguladores Europeos de Servicios de Medios Audiovisuales (ERGA) sobre la implementación del código de prácticas de desinformación de 2018 de la Comisión de la UE revela "debilidades significativas" vinculadas a la falta de transparencia y enfoque voluntario. ERGA propone pasar del enfoque actual de autorregulación flexible a la corregulación. El código apuntó a compañías como Google, Facebook y Twitter.